¿Cómo pudiste?





¿Como pudiste?
Por: Sonia
Cap. 1

Una calle común y corriente como cualquiera de esta ciudad, bueno... esta calle era especial, aparte de ser muy transitada, era representativa para ellas dos.

Así es, entre el gran tumulto de personas hay dos mujeres que se miran de frente, hace frío esa noche... recién iniciaba el Invierno, una tiene una gabardina café y la otra un hermoso saco azul.

- Así que viniste- dice la chica de la gabardina, la otra no contesta nada.

Si abrimos más la imagen, notamos que están frente al gran teatro de la Ciudad, esto no es una casualidad, ambas son actrices, otra cosa que comparten en común.

Siguen mirándose, la gente pasaba junto a ellas y no las nota, así pasa en lo cotidiano... no miramos a nuestro alrededor, no notamos nada.

Si la gente hubiera puesto atención, hubiera notado que la chica de azul parecía triste, inclusive lloraba. Mientras que la chica de la gabardina café se le notaba victoriosa, era obvio que se burlaba de la otra.

Parecía que... así es, ambas compartían una relación amorosa de poco más de 10 años.

La gente sigue caminando, ellas se sigue mirando sin moverse... hasta que, sonó un disparo.

- ¿Cómo pudiste?- exclamó una voz... era una de las chicas que se desplomó al suelo.

La otra sólo miraba como caía, como la sangre derramaba por su pecho...

La gente corría horrorizada, gritos, histeria. La causante fue detenida, no opuso resistencia, soltó el arma y subió a la patrulla.

¿Quiénes son esas dos mujeres? ¿Quién mató a quién?

Empecemos por dar nombres, la chica del saco azul es Mariana... y esta es su historia...


¿Como pudiste?
Por: Sonia
Cap. 2

Mariana era una chica bastante ordinaria, proveniente de una familia algo disfuncional... siempre tuvo un sueño, convertirse en una gran actriz de teatro.

Su padre solía llevarla a pequeños foros cercanos a su casa, no tenían mucho dinero y eso acortaba muchos de sus sueños, más no la esperanza.

Terminó sus estudios de preparatoria y ella esta dispuesta a seguir estudiando, pero no podía costearlo. Así que huyo de su casa, se fue a la ciudad y decidió emprender una nueva vida.

Primero consiguió uno que otro trabajo, tenía poco dinero y la presión era demasiada. Afortunadamente salió la convocatoria para la escuela nacional de teatro, fue a uno de los castings...

Y no se quedó.

Con solo 15 años, decidió que no se daría por vencida, practicó demasiado y trabajó duro para mantener su vida en la gran ciudad, era una chica solitaria... tenía pocas amigas, pero una ilusión muy grande.

Así pasaron 3 intentos más, ahora con 18 años, Mariana se notaba algo derrotada, más no se dió por vencida.

Esa noche sería especial, acudió a una función especial de la compañía de teatro más importante de la Ciudad, la presentación era en el mismísimo teatro de la Ciudad.

Localidades agotadas, Mariana encontró un boleto a precio accesible y llegó temprano a la función, hubieran visto sus ojos, eran los de una ilusión, los de un sueño que no se apagaba... que vivía más y más.

Y entonces la vió, con tan sólo 25 años de edad... era la principal estrella de la compañía (y también la dueña), era una mujer hermosa, una actriz talentosa y... encantadora.

¡Cuánto le hubiera gustado ser cómo ella! Pero Mariana no podía aspirar a eso, no con su pobreza y con su aparente poco talento.

Salió antes de la función, se sintió un poco mal y aguardó afuera del teatro, cigarrillo tras cigarrillo meditaba sobre lo infortuna que era su vida, la frustación y el fracaso.

- ¿Disculpa, tienes fuego?- preguntó una encantadora voz, Mariana levantó la mirada y ... no podía creerlo, ¡era aquella hermosa chica actriz!

Temblorosa le ofreció fuego, alabó su actuación y sonrió.

- Gracias- dijo la otra chica, sonrió de vuelta y se fue...

Y de repente, la ilusión de Mariana llegó con más fuerza.

Y no sería en balde, al fin en ese año logró quedarse en la Nacional de Teatro.
¿Como pudiste?
Por: Sonia
Cap. 3

Creo que está de más decir lo exigente que era la escuela, tenía un gran renombre y muy pocas personas lograban acceder por méritos propios. Además, saliendo de ahí tenían una sola oportunidad para pertenecer a una importante compañía. Así que Mariana no pudo más que echarle todas las ganas del mundo, trabajando y estudiando arduamente.

Mariana era una chica muy linda, tierna, inocente, además... lesbiana. Desde pequeña se sintió atraída por mujeres y lo corroboró cuando se enamoró perdidamente de una de sus compañeras (a la que nunca le habló).

Desde ahí debió de haber notado todo, Mariana solía llevar sus emociones muy al límite, se sintió muy mal por esto de su compañera y peor aún cuando descubrió que andaba con un chico de otro salón.

- Es el momento de dejar de pensar en el amor- dijo un día y así lo hizo.

Mariana era una actriz innata, tenía un talento excepcional que merecía ser pulido para embellecerlo. Después de solo dedicarse arduamente a estudiar y a ser la mejor. Lo consiguió.

Su último año de escuela estaba próximo, después de tantos años de haber llegado a la Ciudad, su felicidad se sentía completa.

Una tarde hubo una función especial en el auditorio, era aquella compañía que había visto unos 3 años atrás, la misma chica seguía ahí... se le veía igual de linda y Mariana se ruborizó de pensar en ella.

Al terminar la función dieron el gran anuncio, las audiciones serían esa semana y debían de anotarse solo quienes estaban cursando el último año, Mariana no lo pensó dos veces y puso su nombre en la lista. Estaba nerviosa, solo había 3 lugares y aún más nerviosa, aquella misteriosa chica sería la directora de las audiciones.

Pánico total.
¿Como pudiste?
Por: Sonia
Cap. 4

La noche previa a su audición Mariana ni pudo dormir, estaba nerviosa e imaginaba que lo echaría a perder todo, ¡ante esa hermosa chica!

Llegó muy temprano, compró un café y fumaba nerviosa afuera de la escuela, de pronto la miró llegar... entro y la miró, volvió a sonreirle.

¿Acaso la recordaba?

Entró, firmó y le dieron un pequeño libreto que debía aprenderse en cuestión de una hora, Mariana tenía una buena memoria (o la había desarrollado para el teatro), se aprendió las líneas y ls repetía.

- Buenos días, mi nombre es Emma y soy la directoria de la compañía- dijo la chica misteriosa

Emma, Emma, Emma... repetía ese nombre la cabeza de MAriana, le costó trabajo vovler a concentrarse.

- No les sirven de nada sus calificaciones aquí, buscamos actores y actrices para nuestra nueva temporada... queremos calidad, madera de actuación. Solo hay 3 lugares. ¡Mucha mierda a todos ustedes!- dijo antes de sentarse y dar inicio a las audiciones.

El lugar de Mariana era el 22, tomando en cuanta que cada audición tardaba alrededor de 15 mins, le tomaría bastante rato.

El momento llegó, acomodó su cabello... vocearon su nombre y entró al salón donde Emma y algunos otros actores estaban, entró y... dijo su nombre.

Emma le sonrió, después le indicó a partir de que líne a tenía que decir y lo hizo.

Mariana una vez que estaba en otro papel, se iba de este mundo... eso era lo hermoso del teatro, ser quien tu quisieras y reperesentarlo.

Terminó la audición y se despidió, salió y corrió al baño a vomitar. No podía más con la tensión, después fue a su casa a descansar un rato.

Los resultados estarían al día siguiente pegados afuera de la dirección.

Mariana se quedaría otra noche sin dormir, por la mañana también corrió a ver los resultados... Emma los estaba pegando, logró acercarse mientras empujaba a otros compañero quienes también esperaban resultados.

- ¡Felicidades!- le susurraron

Y entonces, vió su nombre... ¡Había sido aceptada! Al girar a ver quién le había susurrado, se encontró con los ojos verdes de Emma.

- Gracias- dijo Mariana muy apenada

- Te esperamos en la compañía el Sábado a las 12, te daremos indicaciones para que comiences a trabajar- respondió Emma y se fue... envuelta en una gabardina café...
¿Cómo pudiste?
Cap. 5
Por: Sonia

Mariana acudió puntual a la cita el sábado en la compañía, quería iniciar su sueño de ser una gran actriz. Su gran ilusión se vió opacada con los comentarios de sus nuevos compañeros de trabaj

"Se deben hacer audiciones para papeles pequeños" , "al menos en 5 años no tienes un papel importante", "comienzas en utilería o vestuario"

"Emma siempre consigue a la mujer que quiere"

¿Emma qué?- pensaba Mariana.

Al parecer Emma tenía una fama de mujeriega, según los rumores había estado con todas las mujeres de la compañía de este y los años anteriores, siempre obtenía lo que quería.

No era para menos, su ascenso en la compañía se dió de manera turbia, ya que su padre era el dueño y un día , sin más, la puso como directora y protagónica en todas las obras. Emma tenía talento, eso er indudable, pero su caracter era algo impredecible, era caprichosa y... siempre obtenía lo que quería (repito).

Aunque Mariana descubrió que la idea de que Emma se fijara en ella no le parecía mal, le gustaba demasiado... desde aquella primera vez.

Pasaron unas dos semanas, se hizo el reparto de papeles y a nadie le sorprendió que Emma obtuviera el protagónico, la sorpresa fue que a Mariana se le había asignado un papel secundario, muchisimo más arriba del rango que tenía.

- No tengo que darles ninguna explicación- dijo Emma al notar los susurros- si no les gusta pueden largarse, pero no sé que idiota desaprovecharía el participar en la más grande compañía del país.- continuó diciendo, miró directamente a MAriana y le dije que la acompañara a su oficina.

Llegaron a la oficina, Mariana temblaba de emoción y de miedo... ¿ella tenía un papel en la obra? Pero ella era nueva, ¿cómo pudo..?

- Mariana, ¿cierto?- dijo Emma sonriéndole.

- Sí-

- Eres una chica muy linda y talentosa, quiero decirte que el haberte seleccionado se debe al casting tan maravilloso que diste... hacía mucho que no me sorprendía con nadie, y es en serio.

Mariana se ruborizó, agachó la cabeza con pena y Emma se acercó, la tomó de la barbilla y... la besó.

- No- dijo Mariana- no quiero el papel así

Emma sonrió un poco, la miró y dijo:

- Eres muy talentosa, quiero explotar eso... llegarás muy lejos

- Eso debes decirle a todas - respondió MAriana

- En realidad se los digo antes de darles un papel- dijo riendo Emma- y sí, obtengo la mujer que quiero y .... te quiero a tí, serás mía tarde o temprano.

- No quiero esto, mi dignidad no vale un papel, así que renuncio.

- Espera, Mariana, disculpa si te ofendí, te quiero en mi compañía... principalmeente, después, ya veremos... pero por favor, déjame trabajar con tu talento- discrepó Emma y le tendió la mano.

Amabas estrecharon sus manos y Mariana dibujo una sonrisa, al parecer ahora ella se había salido con la suya.
¿Cómo pudiste?
Cap. 6
Por: Sonia

La obra tenía que estar lista en menos de 6 meses, así que los esfuerzos fueron arduos y la exigencia era brutal.

Emma era una perfeccionista, no se tentaba el corazón en regañar a quien no cumpliera el alto rango de perfeccción que tenía la compañía y no era para menos, la misma Emma era pefecta, sus ejecuciones eran implecables y por eso se le llamaba la mejor actriz de teatro en el país.

Mariana estaba embelesada con su nueva jefa (maestra), pero su convicción era de acero y decidió dedicarse de lleno al teatro (y a la escuela).

Emma hacía todos los intentos por cortejarla, le daba pequeños detalles, caricias indiscretas, insinuaciones, todo tipo de cosas para que Mariana cayera en sus redes de pasión, pero no resultó así.

- No soy así, Emma- dijo Mariana

- Lo sé, por eso te voy a tener pronto y no será para un rato, me gustas en verdad... me gustas como para compartir muchas cosas juntas.-

Mariana se quedó algo sonrojada, esas palabras fueron muy hermosas y las sintió reales, bajó sus defensas y... poco a poco, se encontró con que se estaba enamorando completamente de Emma.

Y no había marcha atrás.
¿Cómo pudiste?
Cap. 7
Por: Sonia

Meses arduos de trabajo, cansancio, estrés pero el resultado se veía satisfactorio.

Faltaban dos noches para el estreno, era una tradición hacer un ensayo general en esa noche, ya que si se hacía la noche anterior era de mala suerte.

Todas las personas partícipes de la obra estaban ahí, armaron el escenario, los actores y actrices se vistieron y maquillaron, el productor de la compañía se encontraba en primera fila y algún público invitado (estudiantes de la escuela de teatro).

MAriana moría de nervios, al fin actuaría de manera profesional ante un público, aunque era un ensayo, para ella representaba concluída uno de sus más grandes sueños.

Todo pasó tan rápido, el ensayo llegó a su fin y parecía que Mariana no había disfrutado su corta estancia en el escenario, aplausos y un productor bastante orgulloso del resultado.

La gente involucrada en el proyecto, actores, actrices, tramoyistas, asistentes, hicieron un círculo y al unisóno gritaron: "Mucha mierdad". Después se despidieron para poder descansar al fin.

Mariana guardó las cosas de su camerino, alguien tocó la puerta y era Emma con una rosa roja:

- Rosas, nunca claveles- dijo sonriendo

Mariana agradeció el detalle y también la invitación a cenar posterior, ya que ambas morían de hambre.

Acudieron a un restaurante elegante, tranquilo y con una terraza encantadora, ahí estaban las dos, compartiendo impresiones de la obra, augurando un éxito total.

Bebieron, rieron, hablaron por mucho rato y el cansanció invadido por alcohol no se hizo esperar:

- ¿Quieres ir a mi casa a beber más vino?- preguntó atrevida Emma, Mariana aceptó.

Subieron al auto de Emma, manejó por un rato hasta que llegó a una de las zonas más exclusivas de la ciudad, era evidente que Emma era una mujer con mucho dinero, haciendo lo que más le gustaba y que no era gratuito su éxito, pues el talento que poseía era innato.

Mariana admiraba eso y también lo envidiaba un poco, ella había sido mesera o cajera todos los años anteriores, tuvo que dejar a su familia y vivir en un cuarto de 4 x 4, no tenía nada... sólo sus ilusiones, su arduo trabajo y su talento.

Llegaron, Mariana se sentó en un sillón y siguieron con el vino, música ligera que puso Emmma... después vinieron los besos, las caricias, Mariana tenía la cabeza completamente revuelta, estaba mareada y no notó nada.

Bueno, el placer es algo dificil de ocultar.

Así transcurrió la primera vez de Mariana, no se lo dijo a Emma quien ni siquiera lo notó, a lo mejor achacó su torpeza al vino.

Mariana despertó con la luz del Sol que invadió el enorme ventanal que tenía frente a sí, estaba desnuda y se enredó en una sábana, se acercó a mirar el panorama que le otorgaba esa casa hermosa y elegante... envuelta en sábanas de seda, con el cabello revuelto y con los restos de Emma en su cuerpo. Algo dentro de ella se sintió bien, sonrió y se recostó de nuevo, Emma la esperaba ahí.

- Te traje el desayuno- dijo

Mariana se sentó y ambas comieron, tenían mucha hambre. Emma acariciaba el cabello de su nueva amante, mientras ésta se limita a sonreir y seguir con las caricias que vinieron después de desayunar.
¿Cómo pudiste?
Cap. 8
Por: Sonia

Aún con todos les besos, cricias, orgasmos y estar ese día juntas... MAriana y Emma no quedaron en nada.

El día del estreno llegó, MAriana llegó primero para prepararse y arreglar todo... junto a ella llegó una de sus compañeras de elenco, era una veterana en la compañía y al parecer esa era su última obra ahí.

Ambas compartían el camerino, se llevaban bien, cordiales...

- Haré de esta presentación memorable- le dijo a Mariana

Mariana asintió, admiraba a su compañera, siguió acomodando su vestuario.

- Deja que te ayude, Mariana- le dijo

Se acercó a donde estaba, acomodaba el vestido y... se miraron a los ojos, se acercaron aún más... hasta juntar sus labios, cada vez más intenso.

Se recostaron en el sillón del camerino, se siguieron besando, tocando, desnudándose lentamente y... la puerta se abrió.

- ¿Ya están listas?- dijo la voz de... ¡Emma!

Las miró así y se notó enojada, salió corriendo del camerino y Mariana se quedó sin habla.

- ¿Ya te acostaste con ella, verdad?- dijo su compañera pero Mariana no respondió - Al parecer quiere algo más-.

Se separaron y siguieron vistiéndose... sin decir nada más.

Faltaban dos horas para el estreno, el productor llegó al camerino de Mariana y pidió hablar a solas con su compañera, MAriana aprovechó para ver a los demás mientras se arreglaban, no se llevaba bien con nadie... la odiaban por su repentino ascenso.

Unos sollozos se escucharon por el pasillo de los camerinos, era su compañera de camerino llorando y saliendo...

- Adiós, Mariana- dijo

Mariana no entendía nada, fue a su camerino y ahí estaba Emma.

- ¿Qué pasó?-

- ¿Te sabes sus líneas?- dijo Emma

Mariana asintió, de hecho había ensayado el papel de la otra actriz en repetidas ocasiones, era la suplente.

- Vas con ese papel- dijo Emma, se levantó y cerró la puerta del camerino. - y también quiero que seas ... mía solamente-

Mariana se sorprendió ante tal propuesta, Emma se acercó... la besó y... bueno, aún quedaban horas para el estreno.
¿Cómo pudiste?
Cap. 9
Por: Sonia

Y de repente cierras los ojos ante la grandeza del escenario, un todo compuesto por tantos factores: gente, apalusos, gritos, emociones que se vuelcan de una a otra persona... Emociones representadas.

Mariana amaba eso del teatro, poder salir de la monotonía de la vida, de su vida... Podía ser quien quisiera en el escenario, una virgen, una puta, una santa... una mujer amada.

No, eso ya lo era. Emma le había confesado su amor y esa noche cosechó dos éxitos, el de su carrera profesional y el de un nuevo amor que lucharía por mantener.

Aplausos, reverencias, flores... Mariana no creía lo que había pasado !Había triunfado!, aunque sus compañeros de elenco eran algo recelosos de la maneta en cómo había llegado hasta ahí... La invitaron a la fiesta de éxito.

Mariana se desmaquilló, se vistió de nuevo y guardó todo lo de su camerino.

- ¿Se puede?- se escuchó, era Emma- Te sienta bien un camerino para tí sola... ¡Felicidades! Los impactaste.

- No es para tanto, Emma. Mi papel fue menor, pero lo hice con empeño.

- Oye, en una obra ningún papel es menor, eres parte de un todo... mi todo.- dijo Emma

Se aceró y la besó, esos besos que Mariana adoraba, que la hacían soñar ... esa era su vida real ahora.

- ¿Vamos a la fiesta?- dijo Mariana

Emma rió - ¿No lo sabes? Nunca me invitan, pero no te preocupes, yo puedo hacer nuestra propia fiesta.

- Vamos, quiero conocer más a todos y...- Emma volvió a besarla, accedió.

Guardaron las cosas y se fueron a cenar; después llegaron al lugar de la fiesta, era la casa de uno de los actores.

- ¡Emma! Qué sopresa...- dijo algo apenado el anfitrión.

Ambas chicas entraron a la fiesta, se sirvieron un poco de alcohol y bailaron por breves instantes... Emma subió al baño y Mariana encontró la oportunidad de socializar.

Pasaron varios minutos y Emma no aparecía, Mariana bailaba con algunos de sus compañeros, bebía, se divertía cómo nunca... su celular sonó.

- ¿Emma?- dijo gritado pues no escuchaba nada por la música... Salió de la casa - ¿Emma?

- Mira hacía adelante- dijo la voz

Y ahí estaba Emma, en su auto... - ¿vienes?- preguntó a través del teléfono.

Mariana torció la boca, ella quería seguir en la fiesta... la estaba pasando muy bien. Pero, Emma era su novia.

Tiró su vaso en el jardín y corrió con Emma, se puso el cinturón y miró con cierta nostalgia su primer fiesta terminada.

- Seguro vendrán otras- pensó y sonrió...
¿Cómo pudiste?
Cap. 10
Por: Sonia

El teatro es todo un universo, tiene sus reglas y sus supersticiones bien claras.

Hay una que dicta que con el vestuario con el que inicias una temporada, debes terminarla. Las temporadas en la compañía duraban poco menos de 2 años... Eran largas, pero así de exitosa era.

Mariana inició con una novia, esperaba seguir por ella con mucho tiempo.

No pasaron ni 4 meses, ambas se fueron a vivir juntas y a compartir todo el día, había ensayos, presentaciones que las mantenían ocupadas y Mariana no quería dejar la escuela, era su sueño y no pensaba terminarlo.

Entonces el único tiempo en el qe estaban separadas, era la escuela... Mariana se graduaría dentro de año y medio y también querían organizar una obra de teatro para presentarla. Por supuesto que Mariana se apuntó, ese sería el evento cumbre con el que terminaría su gran sueño.

Las cosas con Emma eran dulces, se había transformado en una mujer cariñosa y atenta con Mariana, ella le cocinaba, le leía, le daba detalles y a veces se escurrían entre los pasillos del teatro a besarse, a sentirse...

- Te amo- le susurraba Emma y Mariana... ella estaba ya muy elevada.

La vida le resultaba feliz a Mariana, no podía haber nada mejor... al fin había encontrado a ese gran amor que siempre buscó e imaginó.

Comenzó la gira de la obra, el viaje era emocionante, compartirlo con Emma, pasear, amarse, compartir algo tan hermoso, como lo era la actuación, con su novia, su amor...

Rápido pasó un año de amor, rápido se terminó la temporada.

El fin de la temporada era en el Teatro de la ciudad, era una tradición que nunca se pasaba de largo.

El mismo vestuario, la misma sonrisa, las ganas de triunfar y todos los sueños de Mariana realizados.

Éxito total, entradas agotadas, aplausos, flores... Una Emma completamente rebozante tomando de la mano a Mariana. Aplausos, se baja el telón.

- ¡Estuviste maravillosa!- le dijo una compañera de MAriana y la abrazó... - Te vemos en la fiesta.

Emma se acercó, tenía cierto dejo de enojo...

- ¿Qué quería? ¿Por qué te abrazó? ¿Acaso tú y ella...?-

Mariana sonrió y besó a Emma, esta se separó...

- Amor, tranquila. Sólo querían invitar... nos a la fiesta-

- Pues no vamos- dijo Emma

- Yo sí voy, en cuanto acabe de cambiarme...

- No y no, ahora ve a cambiarte... te veo afuera.-

Mariana no entendió que fue todo eso, se cambió y salió... ninguno de sus compañeros estaban. Emma estaba afuera, con su coche estacionado. Mariana subió.

- ¿Y los demás?-

- Se fueron- dijo Emma- Perdón por ponerme así,¿vamos a casa?

- Pero yo.... quería...- titubeó Mariana

- Anda, vamos... Dejaré que escojas la nueva obra- y Emma la besó

Entonces MAriana se respondió a aquella pregunta:

"No, no habrían más fiestas..."
¿Cómo pudiste?
Cap. 11
Por: Sonia

Emma era una verdadera genia, estaba seleccionada la obra y le hizo los arreglos necesarios. Abrió el casting externo para seleccionar a 3 nuevas personas.

De las personas que había seleccionado junto con Mariana, sólo quedaba 1, la gente no aguantaba el caracter de Emma pero sabía que era una importante y gran puerta para otras compañías. Así que el esfuerzo de soportarla valía la pena.

Estaba listo el casting externo, ahora iba el interno... Esta vez había 3 protagónicos, eran los personajes más deseados.

Pasó una semana de descanso, la única entre temporadas, se colocó la lista de personajes y Mariana tenía uno de los protagónicos.

¿Sorpresa? Para nada... la otra sorpresa fue que otro de los protagónicos lo tenía una de las nuevas.

¿Sorpresa para Mariana? Sí, más cuando al querer preguntarle a Emma en su camerino, encontró precisamente a las dos protagónicas desnudas y jadeantes.

- ¿Emma?- gritó Mariana - ¿Cómo pudiste?

Emma se levantó, tomó un bata y se arrodilló ante Mariana.

- Lo siento, lo siento, lo siento... yo no, no puedo evitarlo.

- Me voy- dijo Mariana y tomó sus cosas, Emma la tomó de los talones, estaba tirada en el suelo llorando.

- No te vayas, por favor... no me dejes. Eres lo más hermoso que he tenido, Mariana... no

- No, Emma, nunca vas a cambiar...

Mariana salió y tomó un taxi, de nada sirvió que Emma corriera... no la alcanzó.

Mariana ahora conocía a más gente, se instaló con uno de sus aigos de la escuela y vivió ahí por algunas semanas... Dos, para er exactas.

Extrañaba a Emma, extrañaba el teatro... pero pudo hacer el casting para la obra escolar, le dieron uno de los protagónicos.

¿Era el comienzo de una nueva vida para Mariana? Ella esperaba que sí, el dolor se hacía intenso... evitaba a toda costa el poder encontrarse con Emma, la amaba... y en eso no había marcha atrás. La amaba y... estaba completamente perdida...
¿Cómo pudiste?
Cap. 12
Por: Sonia

Dos semanas le duró el gusto, una tarde al llegar a su nuevo hogar se encontró con Emma sentada en el pasillo y un gran ramo de flores.

- Lo siento- susurró Emma

Mariana se sentó junto a ella, la abrazó... Emma lloraba demasiado, eran lágrimas de amor, de arrepentimiento. Al menos de eso se trataba de convencer Mariana.

- No quiero que lo hagas de nuevo- dijo Mariana y la abrazó

Se besaron, se abrazaron, lloraron...

- No, no , no mi amor... yo estaré contigo solamente, para que lo entiendas te diré que la despedí, no la quiero en mi compañía, pero a ti sí... Regresa, te necesitamos, te necesito en mi vida...

Mariana sonrió, tomó sus pocas cosas y fue con Emma, ni siquiera le agradeció, subieron al auto.

- Tengo una sorpresa- dijo Emma y sacó un sobre de la guantera, Mariana lo abrió...

- ¿Estamos concursando en las Nacionales?- dijo con emoción

Cada año se hacía un concurso de teatro a nivel Nacional, la compañía ganadora participaría en una presentación a nivel mundial, viajes y mucho dinero en juego.

- Yo también tengo una sorpresa, fuí seleccionada para el protagónico de mi obra de graduación.

Emma rió un poco -¿en serio? Wow...-

Mariana se sintió algo mal, no dijo más... Emma la tomó de la mano.

- Perdón, es que después de esto del concurso estoy muy elevada, ¿te imaginas lo que significaría eso para mí? La directora ganadora de todo el pais, la mejor compañia... mi compañía.

Mariana no dijo nada, guardó el sobre y llegó a casa con Emma.

Esa noche tuvieron sexo, pero a Mariana no l satisfacía tanto, al fin lo entendió... sus sueños no eran nada comparados a lo que Emma era.

Mariana... ¿qué es lo que era? O más bien, ¿quién era?

Al menos por ese momento, era actriz de la compañía de Emma y futura actriz profesional. ¡Qué emoción!

Arduo trabajo, participar en dos ensayos a la vez, dos obras... el mayor reto de Mariana, muchas veces no dormía bien, no comía ni descansaba, tenía que aprenderse líneas y ensayar.

Pero eso a ella le estaba gustando demasiado.
¿Cómo pudiste?
Cap. 13
Por: Sonia

- Ya no puedes con esto, debes elegir- le repetía a Emma cuando descubría a MAriana cansada o bostezando.

- Sí puedo- se repetía Mariana.

Pasaron sólo unos 4 meses, Emma descubrió dormida a Mariana en su camerino.

- Mariana- gritó

Ésta se despertó y miró a Emma...

- Ve tus ojeras- volvió a decirle- Debes de elegir ahora, no pienso perder mi oportunidad con esta obra por tus caprichos escolares.

- No es un capricho escolar, es mi sueño, Emma.

- El mío también, y no lo arruinarás tú... Decide ahora, sino para comenzar a ensayar con tu suplente, ya no puedo tolerar más esto.

Mariana se miró al espejo, se le notaba cansada... Emma la miraba fijamente, con actitud retadora... Mariana agachó la mirada.

- Seguiré contigo- tomó su bolsa y salió

- ¿a dónde vas?

- A avisarles a los demás...

Emma sonrió de satisfacción, ahí estaba su futura sucesora.

Mariana lloró, ahí estaba perdida su gran oportunidad, esa por la que luchó durante tantos años.

Es evidente que Mariana perdí la oportunidad de graduarse, pero miró el lado amable... estaba con el amor de su vida en la más importante compañía y si ganaban, MAriana tendría ofertas en varias compañías, sería reconocida y... para eso no necesitaba graduarse ¿verdad?

Ahora se dedicó de lleno a la obra de la compañía, a la obra de... Emma.
¿Cómo pudiste?
Cap. 14
Por: Sonia

La decisión que había toado Mariana era le mejor, al menos de eso se convencía ella. Emma se lo mostraba, la llenaba de detalles, de caricias, de besos, la consentía y mimaba, la llenaba de sexo, de excelente sexo que dejaba a Mariana tan aturdida y saciada.

Emma comenzó a tener más presión, pero quería que la obra fuera la ganadora en el concurso que se acercaba, era antes del inicio de la temporada.

La fama comenzó a llegar poco a poco pra Mariana, entrevistas, invitaciones a mirar otras obras, inclusive a participar dentro de otras compañías. Todo eso lo rechazó momentáneamente, quería que la fama llegara en cuanto se encumbrara en el papel de esta obra, lo haría bien y ... su sueño estaría completo.

Emma comenzó a mostrarse algo presionada, pero nunca dejó que Mariana lo padeciera, un día antes del concurso solo durmieron por horas en su cama, abrazadas, pidieron pizzas y miraron algunas películas.

- Ganaremos- dijo MAriana abrazando a Emma.

- Lo sé, por algo la dirigo yo, le he puesto todo mi empeño- le respondió.

Y Mariana volvió a recordar, esa era la obra de Emma.

¿Ganaron? Por supuesto que sí, Emma era una profesional y la obra era una verdadera joya. La compañía entera viajó a Budapest para recibir un reconocimiento, una suma de dinero y presentar la obra ganadora (la mejor del país).

- ¿Ya ves? Si hubieras seguido en la obra escolar, te hubieras perdido de toda esta gloria que ahora te comparto- le dijo Emma a Mariana.

Mariana lo sabía, su carrera resultaría exitosa en cuanto siguiera con Emma, haciendo lo que ella le pidiera, explotando y sacando su talento.

El viaje fue de ensueño, aunque a Mariana le hubiera gustado visitar más lugares, pero Emma no quiso salir del hotel en diversas ocasiones, ni para convivir con el resto de la compañía o participantes.

- ¿No te aburres, Em? Quiero salir-

- Hazlo si quieres, pero te dejo afuera-

- Entonces dormiré por ahí con otra chica- dijo Mariana en broma.

- Hazlo si quieres, aunque entonces te olvidaría de mi para siempre, y recuerda que sin mí... no habría nada de esto.

Mariana la miró algo consternada- Era una broma- dijo desanimada y decidió quedarse, tomar un relajante baño en el jacuzzi, se sentía algo mal.

Emma llegó después, se disculpó.

- Sal si quieres- le dijo

- Prefiero quedarme- susurró Mariana, Emma la besó... se quitó la bata que tenía y se metió al jacuzzi con ella.

- Bueno, entonces habrá que relajarnos las dos- dijo sonriendo Emma
¿Cómo pudiste?
Cap. 15
Por: Sonia

La temporada dió inicio... Los nervios estaban a flor de piel para todos, menos para MAriana y Emma quienes compartían su piel la una con la otra.

Era ya una especie de tradición, sentirse antes de la función, el estrés se iba y se creaba una conexión única que era necesaria en el escenario.

Mariana era feliz con Emma, la amaba demasiado... tanto como para llevar su carrera a un lado del Emma. Pero la amaba y de eso estaba completamente segura, nadie le hacía sentir lo que ella y dudaba que alguien lo hiciera.

La primera función siempre es la más dificil, pero... de repente, Mariana se transformó en su papel, actuó y... triunfó.

Ovaciones de pie, aplausos ensordecedores, ella tomando de la mano a Emma... y...

- Quiero aprovechar para...- dijo Emma arrodillándose, frente a todos...
- ¿Quieres casarte conmigo?- le preguntó a Mariana.

Imaginen la sorpresa de ésta, abrió los ojos enormemente y lloró... era felicidad pura, Emma tenía en una caja un anillo que Mariana había visto en Budapest.

- Claro que sí- gritó Mariana emocionada y ambas se besaron.

El público aplaudió, pero sus compañeros de reparto no se miraban tan entusiasmados, de cierta manera sentían cierta pena por MAriana.

REgresaron a sus camerinos, Mariana abrazó a Emma... le preguntó cuando lo había decidido:

- Cuando me di cuenta que quería amanecer contigo el resto de mi vida- dijo y la besó.

¡Vaya inicio de temporada tan mágico para Mariana! Muchas emociones se vinieron en esa segunda temporada en la compañía.

Pero aún faltaba lo mejor.
¿Cómo pudiste?
Cap. 16
Por: Sonia

- Me voy- le dijo Emma a Mariana sosteniendo un sobre que recién le había llegado- Me solicitaron en Italia par dirigir una obra- dijo emocionada.

- Pero faltan 3 meses para terminar la temporada- dijo Mariana

- La cancelé, debo irme de inmediato.

- ¿Te vas sola?- preguntó Mariana

- Pues claro, ¿qué esperabas? ¿qué te llevara conmigo?

Mariana no dijo nada, después de tantos años se había acostumbrado a los chistes irónicos de Emma, pero seguían doliendo... Se sintió estúpida en un momento, ¡Claro! ¡Emma era la estrella! Mariana sólo era una actriz más en la compañía de Emma... no habría más.

- Pero... te dejo a cargo amor, tienes la oportunidad de escoger a los nuevos elementos de la compañía y seguir ensayando la obra, renovar los contratos de quienes se quieran quedar y... pues ya, no hay más.

- ¿Cuando te vas?-

- En dos días, así que aprovechemos el tiempo...

Diciendo esto la tomó de la cintura y la besó, la llevó hasta la cama... Mariana se sentía algo rara, triste, los besos fueron fríos, las caricias fueron vacías... Esa despedida en el aeropuerto fue... un alivio.

Mariana se quedó sola en la casa de Emma, era enorme... y entonces se encontró completamente sola, no tenía amistades, no conocía ningún lugar divertido para salir... Estaba sola.

Acudió a la compañía, la esperaban algo felices... el ambiente era cordial y sonreían más. Además, el trabajo no era arduo.

Llegaron las audiciones, Mariana resultó ser bastante crítica en cuanto a potencial de quienes participaban.

- Soy el número 35, mi nombre es Juliana...

Esa voz le resultó ... encantadora. Mariana subió la vista y se encontró con unos chinos rebeldes cayendo sobre la frente de aquella chica, morena y... hermosa.

- Adelante- dijo Mariana titubeando

- ¿No tienes que darme pie?- dijo Juliana

- Es verdad- respondió Mariana y la audición comenzó.

Y también... un nuevo acto en la vida de Mariana.
¿Cómo pudiste?
Cap. 17
Por: Sonia

Juliana, Juliana, Juliana... los sueños de Mariana se vieron invadidos por ese nombre.

- ¿Ya escogiste a alguien?- le preguntó Emma, hacían videollamadas siempre a la misma hora de la noche, parecía un reloj.

- Ya, espero que te guste mi selección-

- Me da igual, siempre se van- dijo Emma riendo.

Pero Mariana no quería que Juliana se fuera, le gustaba demasiado como para dejarla ir, era algo talentosa y ... la aceptó en la compañía.

Firmaron el contrato, se volvieron a seleccionar los papeles de las personas que habían dejado la obra... Juliana fácilmente obtuvo uno.

Mariana no podía dejar de pensar en Juliana, se ponía nerviosa cuando estaba cerca de ella, cuando ensayaban juntas, cuando le preguntaba algo... Juliana era una mujer hermosa, tierna, talentosa, amable, sonriente, cálida...

Sí, a Mariana le encantaba Juliana. ¿Cómo podría decírselo?

Mariana recapacitó, miró el anillo que tenía en su mano... recordó el compromiso con Emma y entonces lo mejor fue alejarse de Juliana...

Pero no pudo, no podía... Su sólo nombre le causaba felicidad, el olor sútil de su perfume, su cabello chino, su piel morena, su sonrisa, sus ojos...

Mariana se enamoró de Juliana... Eso estaba mal.

- Hola, creo que no hemos hablado bien desde el ensayo- esa era Juliana, Mariana fumaba afuera de la compañía. -¿Esperas a alguien?

- No, sólo miraba la tarde... es hermosa ¿no crees?

- ¿Quisieras ir a beber algo conmigo? Conozco una cafetería cerca- dijo Juliana y MAriana accedió.

Hablaron por un par de horas, Juliana también estudiaba en la Nacional de Teatro, se graduaría dentro de 2 años, MAriana le contó sobre su tragedia escolar pero la satisfacción de haber ganado.

- Pero parece que la única que ganó fue Emma- dijo Juliana algo irónica.

Mariana no respondió nada, pero reflexionó un poco... Era cierto, la que disrutaba toda la gloria era Emma, se acordó... miró su reloj y se disculpó.

Mariana tenía que llegar puntual a la videollamada o Emma se enojaría, aunque cada vez le resultaban tediosas... pues sólo Emma hablaba de lo maravillosa que era Italia.

- ¿Y si voy a visitarte?- le preguntó Mariana.

- Oh no, deben ensayar para iniciar la temporada... falta poco, además... regresaré pronto, amor.

- Te amo- dijo Mariana... pero no estaba convencida de ello.

¿Y si Juliana tenía razón? ¿Todo lo mejor era para Emma y Mariana se estaba quedando sin nada?

Le dió miedo pensar eso, miedo de descubrir que era cierto... si miraba un poco más allá, descubriría que no tenía nada, ni familia, ni una carrera, ni un futuro estable en el teatro y posiblemente... ni un amor eterno.
¿Cómo pudiste?
Cap. 18
Por: Sonia

¡Qué fácil resulta ilusionarse! Mariana lo sabía bien, quizá se lo achacaba a la falta de afecto con la que había vivido hasta ahora, aún teniendo a Emma, las cosas resultaban vacías, frías.

¡Qué fácil resultó ilusionarse de Juliana! A Mariana le gustaba demasiado y era completamente correspondida, sólo que Juliana guardaba distancia por aquello del compromiso entre Emma y Mariana.

Los ensayos siguieron, la obra quedó lista aún con más tiempo de antelación y la compañía se tomó unas vacaciones de un par de semanas.

- ¿Vas a salir de viaje?- le preguntó Juliana a Mariana (con quien "casualmente" compartía camerino)

- No creo, debo esperar a... a que las cosas se queden bien y todos esos detalles- respondió MAriana nerviosa

- ¿Y tú prometida?

- Seguirá en Italia- dijo Mariana sonriendo mientras se desmaquillaba, Juliana se acercó y la abrazó por los hombros...

- Me gustas mucho, Mariana- dijo

Ambas se miraron en el espejo, compartían una misma sonrisa... Mariana tomó la mano de Juliana y la besó, después volteó y... posó sus labios en los de ella.

Un beso largo, un beso cálido, un beso que le removió una serie de sentimientos que ni siquiera sabía que existían... después fue otro y otro, toda una serie de besos repetidos una y otra vez, hasta que los labios se entumecieron.

- Lo siento- susurró Juliana

- ¿Qué? A mi me gustas... desde el primer día y...

Juliana la calló con otro beso, las palabras estaban de más... a partir de ese día, algo se creó entre ellas dos, algo íntimo, secreto y lleno de complicidad para ambas.

Pero llegó la confusión para Mariana, muchas veces le dijo que no podía dejar a Emma, que la amaba en verdad ... pero, Juliana, ella le cambiaba todo el mundo.

- No te pido que la dejes, sólo que te atrevas a vivir, a vivirte... y me dejes estar contigo-

Y así lo hizo Mariana, durante las semanas de vacaciones Juliana fue a vivir con Mariana, compartiéndose en todos los sentidos, revolviendo esa cama donde antes sólo había estado Emma...

Ahora Mariana comenzaba a sentirse viva.

Aunque no duró mucho, Emma llegó al fin...
¿Cómo pudiste?
Cap. 19
Por: Sonia

Emma llegó, Mariana retomó su rutina de sombra...

Primero revisó los nuevos elementos, Juliana entre ellos, pareció parecerles buena idea y ni siquiera consideraba atractiva a la ahora amante de su prometida.

Pero del ensayo general no se dijo lo mismo, con la histeria que la caracterizaba... regañó a todos ahí, se puso a cargo y se pusieron a trabajar con el tiempo encima, el estreno sería en escasas 4 semanas.

Aunque, el exceso de trabajo le impidió notar del todo lo que sucedían entre esas dos, quienes seguían en el mismo camerino...

Emma no era una santa, había tenido una infinidad de aventuras en Italia, pero a Mariana ya no le importaba, estaba cegada ante la luz de Juliana que le inyectaba vida y energía.

Un roce de manos, eso fue lo único que vió Emma y que desató la bomba.

Primero las separó del camerino, después se puso a cargo de móvil de Mariana y de su tiempo... no la dejaba salir sin ella, no la dejaba hablar con nadie... llegaban y se iban juntas, aún entre escenas, a veces se quedaba tras bambalinas para mirar lo que hacía su prometida.

Estaba cegada en celos...

Y Mariana... comenzó a reaccionar, ya no quería eso... quería la libertad que le brindaba Juliana, la libertad de conocerse y sentirse a sí misma.

Entonces, tomó una decisión.
¿Cómo pudiste?
Cap. 20
Por: Sonia

La temporada inició con normalidad, exitosa cómo siempre y con aún más atención por parte de la prensa, Emma estaba en la cumbre de su carrera y la invitaban a todo tipo de cenas fastuosas, por supuesto seguía sin soltar a MAriana.

Pero, "si se quiere, se puede", Mariana y Juliana lo sabían... buscaban hasta los más mínimos momentos para besarse, para mirarse... para todo.

Mariana no le comentó de su decisión a Juliana, quería dejarla fuera de todo... ademas, ella sola tenía que reunir el valor suficiente.

Era la mitad de la temporada, Mariana se encontró hastiada con Emma, se dió cuenta de todo lo que ella le había ocasionado...

Resulta que después de una de las funciones, un agente de otra compañía se acercó a ella y le preguntó el porque de su negativa a participar en la obra que le habían ofrecido.

- No tenía conocimiento de nada- dijo Mariana confundida

- Pero nosotros y otras compañías le hemos dejado los datos con Emma- respondió aquel hombre

- Ella no me ha dicho nada- el coraje invadió a MAriana.... se disculpo y confrontó a Emma en su camerino.

- ¿Qué pasa cariño?- dijo Emma

- ¿Por qué no me dijiste sobre las ofertas en otras compañías?

- Son obras menores... nada como esto.

- ¿Qué es esto, Emma? ¿Ser tu sombra? ¿Ser tu puta? ¿Qué es lo que soy?

- Nada- dijo Emma

- Entonces me voy, no me importra nada más.

Emma cerró la puerta y empujó a Mariana al tocador... fue un empujón fuerte... se escuchó el vidrio rompiéndose.

El universo del teatro es uno muy superticioso... cuando se rompe un espejo, dicen que la mala suerte rondará sobre el actor o la actriz culpable de romperlo...

Esta vez... fue el rostro de Mariana el que se impactó en el vidrio.
¿Cómo pudiste?
Cap. 21
Por: Sonia

La temporada de la obra terminó, Emma agradeció como siempre... con su sonrisa hipócrita. Cuando le preguntaron sobre Mariana, ella se limitó a decir "hemos decidido que ella deje de explotar su talento aquí, le deseo lo mejor."

Vemos a una mujer envuelta en un saco azul afuera del teatro, fuma un cigarrillo... nos acercamos y notamos una cicatriz en el costado izquierdo de su rostro, de la oreja al mentón, es una cicatriz bastante prominente, además... se ha quedado sorda de ese oído.

Así es, aquella mujer marcada por el odio es Mariana, después de que el espejo la marcara, Emma la dejó en la calle, la abandonó por completo y la dió por despedida.

Aún sangrando, Mariana fue a la casa de Juliana, ésta la axulio y le ofreció su casa para vivir y su corazón para quedarse.

Así comenzaron a vivir juntas, obviamente nadie de sus compañeros lo sabía... se mudaron a un departamento más accesible y ocultaron todo.

De nada le sirvió a Mariana buscar trabajo, nadie la quería por su horrible cicatriz y el hecho de su sordera que afectaba durante los ensayos.

Puso un letrero en la puerta y... comenzó a dar clases particulares, ganaba muy poco pero al menos podía seguir en el teatro... de alguna manera.

Ahora sí que no era nadie, todo mundo se olvidó de ella y Emma se regodeaba en su gloria.

PEro, Juliana no la dejó caer... no la dejó deprimirse, le entregó toda su vida, sus sueños, sus ilusiones... y entre ambas, decidieron construir algo hermoso.

- Este es el inicio de mi nueva vida- le dijo a Juliana esa noche, cuando fue a ver el final de la temporada.

Ahora sí, Mariana empezaría a vivir por sí sola, esta vez no estaba sola... Juliana estaba ahí para mostrarle lo que era el verdadero amor.

Aunque... Mariana no se notaba tan convencida de seguir...
¿Cómo pudiste?
Cap. 22
Por: Sonia

¿Cómo puedes volver a vivir cuando tu vida quedó destruída? ¿Cómo vivir cuando alguien más le dió fin a todos tus sueños?

De diversas maneras, en diferentes tiempos, Emma terminó con Mariana, la había matado, la convirtió en una incompetente para realizar su amada profesión. Mariana no volvería a actuar y esa era la pura verdad.

¿Cómo poder vivir después de eso...?

El carácter de Mariana se volvió amargo, las depresiones eran mal acompañadas por alcohol barato, se descuido en su apariencia y su repentina delgadez sólo acentaba la cicatriz en su rostro, reflejo de la marca en su alma.

En verdad que la vida hubiera terminado si Juliana no estuviera ahí, ella la procuraba, la cuidaba, a veces la levantaba de la mesa, completamente ebria... completamente destruída.

- Debes dejar eso... debes dejar de lastimarte así... Yo te amo, MAriana, por favor, por favor... - le decía Juliana

- A ti te es fácil, volviste a firmar un contrato en la compañía-

- Me dejaron de tramoyista, al parecer no valgo la pena para Emma... - respondió algo decepcionada Juliana

Mariana la miró a los ojos, acarició su rostro...

-Saldremos de esto- le susurró y la besó en la frente.

La pregunta aquí era... ¿cómo? ¿Cómo saldría Mariana de ese pozo sin tocar fondo? ¿Sin destruirse y llevarse a Juliana consigo?

Acudió a un grupo de ayuda, era algo escéptica con eso... pero desde la primera sesión comprendió que estaba enferma, tenía una grave dependencia con Emma.

Y decidió acabar con ello.
¿Cómo pudiste?
Cap. 23
Por: Sonia

-Sólo es cuestión de decidirse- decían todos quienes acudían al mismo grupo de Mariana, y no lo entendió hasta que escuchó todos esos testimonios.

Entonces, un día sin quererlo ni preparlo, subió y contó lo que le había pasado, la cicatriz, el odio, el rencor...

Lloró y lloró, dejó salir todo lo que había guardado por tanto tiempo y... fue momento de sanar.

Puntualmente acudía a sus sesiones, su mejoría era lenta pero segura... y una de esas tardes, uno de sus compañeros se acercó:

- ¿Eres actriz? Me parece haberte visto en algunas obras..

- Lo era- dijo Mariana sonriendo- ésta cicatriz no me deja volver a actuar.

- Tengo un pequeño grupo, es teatro experimental... quiero invitarte, la paga no es mucha pero podrías retomar otras maneras de hacer lo que te gusta... ¿vienes?

Mariana no respondió, tomó la tarjeta y se fue a casa... lo consuktó con Juliana:

- Debes ir, no pierdes nada.

- Ya todo lo tengo perdido- decía fatalista, MAriana.

- No, me tienes a mi, tienes tu vida y próxikmamente tu carrera...

Y Mariana decidió ir, no perdía nada...

Aquella decisión fue la mejor, Mariana descubrió otro mundo dentro del teatro, ni su cicatriz, ni su sordera le impedían expresarse a través de su cuerpo, desarrollar sus sentidos... explorar un sinfín de sensaciones que nunca pensó que en un escenario pudieran experimentarse.

Pero bueno, de eso se trata el teatro experimetnal.

Mariana prontó se convirtió en una de las favoritas en las presentaciones que hacían en pequeños foros, la paga no era buena... pero las experiencias que adquirió MAriana eran invaluables. Sobre todo la confianza en sí misma, pronto dejó de pensar en su cicatriz y... en la marca de su rostro, pronto volvió a sentirse con vida.

El teatro de nuevo había regresado a salvarle la vida.

A la par, estaban ya a medio año de terminar la temporada en la compañía de Emma, Juliana seguía trabajando ahí... pero eso no parecía importar.

La vida de Mariana parecía brillar, parecía volver a latir su corazón y retomar el camino que Emma le había borrado.
¿Cómo pudiste?
Cap. 24
Por: Sonia

El teatro es un universo que te da demasiado, pero cuando te lo quita suele ser brutal... Las emociones suelen ser más exacerbadas...

Mariana seguía practicando distintas modalidades de teatro, se volvió popular dentro del mundo underground de la gran ciudad... aquel mundo que parecía estar lejos de los reflectores...

Pero, no era así.

En una de sus exitosas y pequeñas funcionas, el amigo de la nueva amante de Emma reconoció de inmediato a Mariana y éste no evito contarle todo a Emma, donde y cuando encontrarla... y quién la acompañaba.

- Juliana- susurró Emma, ahora entendía todo... quién había sacado del hoyo a Mariana - Pues si no eres mía, no serás de nadie... MAriana-

Mariana y Juliana seguían juntas, el amor entre ambas era fuerte y duradero, Mariana entendió el verdadero significado de amar estando en los brazos de Juliana, los besos, las caricias, las miradas, las palabras de apoyo y de confianza, el soporte emocional y constante... el calor de la otra persona, el calor que tú le transmites a la otra persona.

Mariana amaba a Juliana, Juliana amaba a Mariana y todo pareía ser feliz ahora, MAriana continuaba con su nueva experiencia de teatro y Juliana como tramoyista...

Era el último ensayo antes de la última función de la temporada.

- Juliana, revisa esas luces... varios actores se han quejado de que les lastima, procura ponerlas más baja o cambiar la tonalidad- le gritó Emma a Juliana y ésta obedeció.

Subió con cuidado y acomodó las tres lámparas que estabn justo arrida del medio del escenario, Juliana padecía de vértigo, cerró un poco los ojos y siguió acomodándo las lámparas...

Pero...

Se escuchó un estruendo enorme, muchos gritos... mucha confusión...

Y el teléfono de Mariana sonó...
¿Cómo pudiste?
Cap. 25
Por: Sonia

- Juliana, Juliana... es Juliana, acaba de caer de los andamios donde estaban las luces... se la llevaron pero... no creo que haya sobrevivido- dijo la voz detrás del teléfono, era uno de los antiguos compañeros de Mariana y el mejor amigo de Juliana.

Mariana se sintió de papel, se cayó de rodillas y comenzó a llorar...

¿Juliana... muerta? ¡No! ¡No! Todo debía ser una broma...

Acudió corriendo al hospital, sólo le confirmaron sus sospechas:

- La señorita no sobrevivió, de hecho ya llegó sin vida... ¿Es usted familiar?

- No... soy una amiga, pero le paso los datos de sus padres.

Mariana no conocía a los padres de Juliana, no aprobaban la vida de su hija, tanto de actriz como de lesbiana.

Mariana regresó a la casa de Juliana, aún no daba credito a lo que había pasado, esa mañana se habían besado, esa misma madrugada habían hecho el amor... el aroma de Juliana aún rondaba en la casa, su risa, su voz... llenaba toda la cabeza de Mariana.

Colapsó. Se tiró al suelo a llorar, a sentirse miserable y se dió cuenta que nunca más tendría una vida feliz, no volvería a amar... Todo estaba terminado para ella.

Volvió a marcar al número del amigo, le preguntó sobre los detalles del funeral y del entierro... Era a la mañana siguiente.

Y en esa fría noche, acostada en el suelo... mirando al cielo, preguntando por lo que había hecho mal... ¿cuál es el castigo que estaba pagando?

Acudió al entierro, lo miró desde lejos y ... cuando todos se habían ido, se acercó a la tumba de ese amor que la había reconfortado, las mismas palabras retumbaban en su cabeza "Cayó del andamio..." "Luces cayeron..." Un punto de lucidez le llegó... Y un nombre salió de sus labios.

- Emma- susurró

Y cuál si la hubiera invocado, Emma apareció...
¿Cómo pudiste?
Cap. 26
Por: Sonia

- Sabía que vendrías, pero no pensé que tan incógnita- dijo Emma

MAriana no respondió.

- ¿Crees que no sabía que vivías con ella? ¿Qué no me he enterado de tus fallidos intentos por regresar al teatro? Entiéndelo, sin mi no eres nadie... tu carrera está acabada, igual que tú... igual que Juliana, ¡Qué en paz descanse!- en tono burlón exclamó Emma.

Mariana se sintió mareada, iracunda... pero se contuvó, caminó para irse de ahí.

- Si quieres regresar, ya sabes donde estoy- le gritó Emma

Volvió a casa de Juliana, no soportaba vivir ahí... se volvería loca en cualquier momento, el dolor la estaba matando, el coraje, el odio, la desesperación, la frustración... y por último, supo que estaba completamente derrotada.

Tomó las pocas cosas que tenía y salió de ahí... salió para nunca más volver.

Toca una puerta... Abren.

- No pensé que vendrías tan rápido- dijo ... Emma.

- Regresé, ¿puedo pasar?- contestó Mariana, Emma le abrió la puerta y Mariana se sentó en el sillón, no decía nada.

Así es, Mariana se rindió al final... decidió quedarse con la única cosa que le daba sentido a su existencia, Emma... y no era un sentido bueno, era uno de fracaso, negativo, pesimista...

Así era la relación que llevaba con Emma, así fue desde el principio, nunca hubo amor, sólo una dependencia, Mariana tenía la necesidad de sentirse viva... de que alguien le mostrara y le demostrara su valor. ¿El error? Es que le encomendó esa tarea a la persona equivocada, a una mujer sin escrúpulos, egocéntrica... alguien como Emma.

Aunque, dentro del corazón de Emma existía una ligera gota de arrepentiemiento, nunca quizo que Juliana cayera, que muriera... ¿hasta donde la estaban llevando sus impulsos? ¿hasta que límite la llevaría Mariana, el deseo de poseerla, de tenerla para ella sola?
¿Cómo pudiste?
Cap. FINAL
Por: Sonia

Dos situaciones límites... No auguraba nada bueno.

En el teatro hay un popular dicho "el show debe terminar", eso fue lo que pasó y la última presentación de esa temporada era esa misma noche. A la par, Emma le diría adiós a los escenarios, se dedicaría de lleno a dirigir. Pero eso, era un secreto.

Vemos a una mujer, apunta un arma dentro de su boca... lágrimas corren por sus mejillas, está sola en su departamento.

- ¿Cómo pude hacer todo esto? ¿Cómo pude matar a Juliana? ¿Cómo...?- grita su mente

Sigue llorando, no se atreve ni a jalar el gatillo, el miedo la paraliza... necesita una última señal.

Mira la mesa del comedor donde está recargada, mira una nota:

- Te espero- dicen esas letras, era un boleto para una función de teatro.

- Entonces...-

Aquella mujer se levanta, toma su saco azul y mete el arma dentro de su bolsillo... toma el boleto y sale rumbo al gran teatro de la Ciudad.

Miles de recuerdos vienen a su mente, la nieca cae y le da frío... pero su determinación es dura, la última que tendrá en mucho tiempo.

Se acerca a la puerta del teatro, la reconocen y ella les pide que entreguen un recado escrito en un papel:

- Es para Emma- dice

Espera afuera, en esa calle común y corriente. La gente transita, la gente ni la mira... ella sostiene el arma dentro de su bolsillo, sin soltarla.

Y de repente, ella sale... ataviada con su gabardina café, encuentra los ojos de Mariana y sonríe con satisfacción.

- Así que viniste- dice Emma.

- Tú tambien, Emma.

- ¿Viste mi triunfo? ¿Supiste de mi retiro?- preguntó Emma

- ¿Te vas de los escenarios? Seguro no resentirán tu perdida.

Cuestión de segundos, Mariana saca el arma, apunta con ella a Emma y... dispara.

- ¿Cómo pudiste?- fue el grito que Emma exclamó por última vez, cayó al suelo y su sangre manchaba la nieve.

- De la misma manera que tú pudiste- dijo Mariana y sonrió.

La gente corría horrorizada, gritos, histeria. Policías llegaron al lugar y detuvieron a Mariana, no opuso resistencia... la subieron a la patrulla y la llevaron a la estación.

Cuando le preguntaron porque lo había hecho, sólo dijo:

- No me arrepiento, volvería a hacerlo... - y fue lo último que quedó asentado en su declaración.

"¿Cómo pudiste, Emma? ¿cómo pudiste... Mariana?"- piensa

Pero... después de tanto tiempo, al fin ... se sintió libre.

Comentarios

  1. Karina5.10.14

    It's amazing :D
    I Love it!
    Thanks for write and share with us!

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  2. Anónimo3.11.14

    Eres la mejor Sonia! Tus historias siempre hacen que no pueda parar hasta leer el final.. <3

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  3. Te adoro simplemente lo mejor que he leído son tus historias... Éxito sigue así.. Felicidades!!!

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  4. Me encanta todo lo ke leo!!!

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