Almacén


Por: -Sonia-
Esta quiero continuarla... luego la retomaré :D

Y estamos de nuevo en esta cama, esta cama que conoce nuestra historia, nuestro momentos... quiero recordar donde comenzó todo... ah si, lo recuerdo... fue en aquella tienda donde solía trabajar, te acercaste y de inmediato quedé prendada a tí... eras hermosa, simpática y sonriente, el trbajar a tu lado me llenaba todos los días.. pero, siempre hay un maldito pero... y este, era un hombre... tu esposo...
Siempre me pasaba lo mismo, enamorarme de las mujeres lejanas, prohibidas y tú... eras una de ellas, o al menos eso pensaba... hasta esa tarde.
Era mi turno extra y me tocaba acomodar cajas en la bodega, lo hacía sin problema, cuando en uno de los pasillos te ví, te sonreí y fingí que trabajaba, en realidad te miraba contar cajas y asomándote entre los estantes... eras tan hermosa, tenías la imagen perfecta de dulzura e ingenuidad... Esa tarde decidí hacer lo que no habpia hecho hasta ahora... hablarte... me acerqué y te ofrecí ayuda...aceptaste que cargara unas cajas y las acomodara en la parte de arriba...
-Eres muy fuerte para ser una chica- dijiste - Me gustan las chicas fuertes- no pude evitar sonrojarme y descubrir ese descarado coqueteo
-A mi, me gustan las chicas... como tú- dije... mientras te acorralaba hacia el final del pasillo
-¿Y cómo soy yo?- dijiste mientras sonreías de una manera retadora
No te deje continuar, te bese y tú me correspondiste...el dulce sabor de tus labios y tu lengua... te sentía cerca pero... otra vez ese estúpido pero, recordé a tu esposo y me separé...
-Esto ... esto... esta mal...- Y corrí a la puerta...corriste detrás mío y me tomaste por la cintura
-Quiero que me lleves a tu casa y me hagas el amor... no sabes cuánto lo he esperado- susurraste
¿REalmente esto me estaba pasando? Volteé a mirarte cómo preguntandote si era en serio y sólo encontré más besos... besos que nos llevaron hasta mi departamento...
Llegamos a mi departamento y de inmediato fuimos a la habitación, moría de deseos de sentirte mía y llenarte de placer por medio de mis caricias... devoraba tus labios...quería devorar más de tí... te fui desnudando rápidamente, estaba desesperada por hacerte el amor... apenas y noté tu ropa interior, era transparente con lindos moños alrededor, primero voló tu sostén y mis manos se dieron gusto a
l sentir tus senos, estaba deseosa en morderlos y lamerlos... que mi boca te hiciera gemir y pedir a gritos más.... mientras probaba tus deliciosas superiores, mi mano no perdió tiempo y buscó entre tu falda... encontró una fuente, un manjar que pronto degustaría pero dí una pequeña entrada con mis dedos... estabas mojada, muy mojada y eso hizo que de inmediato saciará mi sed con tus labios mojados... la entrada a un paraíso... movía mi lengua rápidamente, al compás de tus gemidos... me excitaba cada palabra que gritabas... algunas sin coherencia alguna, sólo balbuceos provenientes del más puro placer, al ritmo de tus gemidos, introduje mis dedos... y los moví de adentro hacía afuera... buscando ese botón que desembocaría la marea... quería succionar esa marea, y no tardo demasiado para que mi deseo se cumpliera, el que liberaras tu extásis en mi boca... gritos, gemidos, jadeos... tu espalda arqueada y mi cabeza entre tus piernas... recuerdo esa noche..me pareció interminable....


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Sumisa

Regla de tres.

Tes yeux